Quién ha realizado el Camino de Santiago entiende la fascinación que ejerce sobre el viajero peregrino, esa sensación de recordar el viaje, porque deja una huella. Eso nos pasó hace un tiempo, al volver a pasar por esta preciosa comarca de El Bierzo y visitar Molinaseca. Posiblemente una de las poblaciones más emblemáticas por su belleza y su tradición. Un pueblo muy bonito y con gran atractivo que es además de un lugar de paso dentro de El Camino, un lugar donde descansar o en el que parar a conocerlo a fondo.
Durante nuestro último viaje por el Camino de Santiago en León, “León en el Camino” volvimos a recorrer Molinaseca, y al tener algo más de tiempo que en las anteriores ocasiones, pudimos disfrutar de una forma diferente de conocer este curioso pueblo.
Índice de contenidos
Para ayudarte a usar esta guía para visitar Molinaseca, hemos creado este índice de contenidos. Esperamos que te sean de utilidad.
Principales elementos patrimoniales:
- Santuario de Nuestra Señora de las Angustias.
- Puente romano sobre el río Meruelo.
- Iglesia parroquial de San Nicola di Bari.
- Calle Real, el verdadero discurrir del Camino de Santiago.
- Casa palacio de Cangas y Pambley .
- La casa con la marca.
- La Plaza del Rollo.
Otros elementos interesantes de Molinaseca:
Información general sobre Bolinaseca:
Esperamos que esta índice os sea de utilidad.
Preparandote para visitar Molinaseca
Este pueblo de El Bierzo es tras el Acebo y Riego de Ambrós la siguiente población de importancia dentro del Camino de Santiago Francés en esta comarca, y ya al tratarse de un pueblo grande, vamos a encontrar gran cantidad de servicios interesantes, tanto para el peregrino, como para el viajero ocasional.
Como otros muchos pueblos asociados al Camino de Santiago, este pueblo se articula en una calle principal donde se sitúan los edificios más importantes, aunque con los años empiezan a surgir otras calles perpendiculares y paralelas a esta “arteria de paso” de peregrinos.
Principales edificios patrimoniales de Molinaseca
Como Pueblo lineal, esencialmente tiene una entrada y una salida, que era el camino principal, aunque actualmente hay una circunvalación para vehículos lo que aleja a los coches del centro histórico. No obstante, la calle principal sigue siendo paso obligado por los peregrinos que descienden desde la Cruz de Ferro camino a Ponferrada. Para ello, el primer hito importante es Santuario de Nuestra Señora de las Angustias, una iglesia santuario adosada a una peña.
Santuario de Nuestra Señora de las Angustias
El peregrino que se adentra en Molinaseca se encuentra justo antes de entrar en el casco urbano con esta preciosa iglesia. Aunque su nombre de santuario realmente puede llevar a engaño, ya que está más próximo a ser una ermita del Camino; y aunque hoy la construcción es de una bella fábrica barroca, parece ser que hay constancia en ese lugar de una primera ermita ya en el siglo IX y a la cual se le tenía bastante devoción. De lejos, lo primero que destaca es la torre campanario que igualmente hace de acceso principal al templo, aunque esta siempre cerrado y se usa una puerta lateral.
El actual templo barroco se levanta a finales del siglo XVII e inicios del siglo XVIII por el patrocinio de sacerdote Don Antonio de Castro y su sobrino, Don Juan Antonio de la Vega y Castro, ambos enterrados en el templo al que profesaban gran devoción. La ermita servía tanto de albergue de peregrinos como hospital cuando hacía falta. Esto hacía que se creara una costumbre de llevarse una astilla de la puerta de acceso de la torre como reliquia o recuerdo del paso por aquí. Para evitar que terminara por desaparecer la puerta de la iglesia, hubo que reforzarla con planchas de hierro.
El interior de la iglesia se adentra parcialmente en la montaña, lo que ejerce un empuje de la construcción que tuvo que ser corregido con la torre campanario, que además de sus funciones tradicionales es un contrafuerte de toda la construcción.
Interior del templo
El interior del templo se articula en una única nave con una bóveda de arista en los dos primeros tramos y una gran cúpula con linterna en la cabecera. El crucero y la capilla mayor están separados del resto de la nave por una reja de bella composición. El altar mayor está dedicado a Nuestra Señora de las Angustias, de la escuela de Gregorio Fernández. Tras este retablo está el un muro que es directamente la propia piedra de la montaña, lo que generaba humedades que estaban poniendo en peligro la construcción. Desde hace unos años se canaliza de forma controlada, de forma que ya no resulta dañino para el templo.
La imagen de Las Angustias se procesiona todos los años en Semana Santa, aunque la cofradía de Nuestra Señora de las Angustias original, fundada en 1561 ya no exista (se extingue en el siglo XX). Otra ha tomado el relevo.
Puente romano
Tras descansar en los atrios de acceso al templo, a una merecida sombra, el peregrino desciende los últimos metros de este monte y se adentra en Molinaseca. Actualmente han surgido muchas casas de nueva construcción a las riberas del río Meruelo, pero históricamente para entrar en la población, el viajero debía atravesar este puente. Resulta difícil hablar del puente sin su reseña histórica, ya que este puente, origen último de la población, es de factura romana, si bien no entero.
Sería recomendado parar unos minutos en las riberas del río, o incluso tomando un refrigerio en alguna de las terrazas junto al puente. Ahí se puede ver que los primeros arcos junto al casco histórico de Molinaseca son diferentes al resto; incluso la forma en cómo se han colocado las piedras. Y es que los romanos que construyeron este puente solo elaboraron un puente con tres arcos por los que pasaba una calzada romana que conectaba las minas de Las Médulas, con Ponferrada y Astorga, pero el río fue variando su cauce, así que durante la edad media fue preciso ampliar nuevos arcos para cruzar el río.
Así los arcos originales han quedado “varados” en tierra y medio enterrados y hay otros 4 arcos nuevos de época medieval, aunque restaurados a lo largo de la historia.
Iglesia de San Nicola de Bari
Ligeramente apartada del camino principal que recorre el peregrino a su paso por Molinaseca, conviene desviarse unos pocos metros y conocer este templo, que pese a no estar a los pies del Camino de Santiago en sí, bien merece su visita.
Se trata de la Iglesia de San Nicola di Bari, un templo barroco en transición al neoclásico que se alza unos pocos metros sobre el resto de la población sobre una loma dominando la villa majestuosa y señorialmente, lo que hace que sea imposible no verlo.
Exterior
El templo actual es una parroquia del siglo XVII al que se accede por dos entradas, una original con escaleras y otra, algo más arriba con una rampa preparada para discapacitados. La puerta de acceso se encuentra en un lateral, rodeado de atrio con bellos olivos.
La torre campanario
La torre campanario posee una hornacina con una escultura de San Nicolás de Bari, permitiendo su devoción a los peregrinos si se encontraban el templo cerrado a su paso. Uno de los puntos más curiosos es el repique de campanas a las doce de la mañana, con una interpretación del “Ave María de Lourdes”.
Interior del templo
Lo primero que llamó nuestra atención, y seguramente lo hará al visitante, es la luminosidad de este templo. Esta iglesia se articula en una planta basilical con la nave central más ancha y alta que las dos laterales; todas rematadas por unas bóvedas de aristas separadas con arcos sobre pilastras y cúpula ciega en el crucero.
A los pies de la iglesia posee un coro alto. La decoración interior barroca es homogénea y está en un estado de conservación admirable, con el retablo de la capilla mayor de estilo churrigueresco del siglo XVII, aunque terminado de dar esplendor durante el XVIII. El santo patrono, San Nicolás, ocupa el puesto central y está representado como obispo. La guinda de este retablo es un Cristo Resucitado en un barroco muy elegante.
Existen otros retablos menores decorando en el interior, todos de una singular belleza. Se nota la devoción de los feligreses y peregrinos que pasan por esta iglesia.
Calle Real, el verdadero discurrir del Camino de Santiago
Esta calle, de aproximadamente 400 metros, atraviesa el casco urbano de Molinaseca. Es la arteria principal y por donde discurre el Camino de Santiago Francés. Prácticamente todos los bajos están dedicados a la venta de productos y servicios para los peregrinos que atraviesan cada día esta población. Desde restaurantes, cafeterías, tiendas de souvenirs, pequeños supermercados,..
Una curiosidad que igual el viajero despistado no se dará cuenta, son los espacios entre casas. Son las Callejas. Para evitar incendios, entre casa y casa siempre se dejaba una pequeña separación, haciendo de cortafuegos. Y según parece, es el origen del apellido Calleja.
Como calle principal, a sus costados están también los edificios y lugares más emblemáticos.
Casa palacio de Cangas y Pambley
A mitad de la calle Real destaca este emblemático casón que ocupa toda la manzana. En sus esquinas unas torres indican la importancia de esta construcción; aunque si queda alguna duda, los escudos de armas nobiliarios de la familia Cangas-Pambley.
Este edificio está declarado singularmente como Bien de Interés Cultural. Su parte trasera posee un paso elevado que permite conectar esta casona con otra más modesta formando un arco en la calleja.
La casa «con la marca»
Esta casona no está en el mejor estado posible de conservación, y es una pena, ya que la rehabilitación que se hizo permite admirar que la parte inferior es original, mientras que la segunda planta la han vestido con bastante pésimo gusto, aunque sea de piedra. Y es que, según cuentan los locales, esta casa; que no sale en ninguna guía, que no aparenta tener ningún interés y que se encuentra, aproximadamente en frente del portal 39 de esta calle mayor posee bastante historia.
Para un viajero con el ojo avizor, se dará cuenta de que sobresale de la línea de la calle, esto hace que se produzca un estrechamiento, además en los laterales que se dan a la calle hay aspilleras y troneras,.. esto quiere decir que es una casa fortificada.
Además, una marca en el uno de los laterales de la puerta de acceso parece indicar que esta casona era una residencia real. Y es que según la leyenda, este edificio era ocupado por los monarcas de León cuando recorrían esta parte del reino.
Hoy, es una vivienda residencial particular, y poco queda de lo que pudo haber sido, puesto que como os hemos comentado, no han tenido mucho mimo en respectar lo que pudo haber sido, aunque se integra bien con el resto del conjunto histórico y por eso, además, destaca menos aún.
Plaza del Rollo
Cuidado con esta plaza, porque podéis pasar por ella y no verla,.. Bueno, la veréis, aunque más que una plaza, es una calle ligeramente más ancha que las otras, y que cuenta con un adoquinado y un empedrado diferente.
Esta plaza se encuentra rodeada de casas típicas tradicionales, donde se encontraba la antigua audiencia, de ahí que hubiera un rollo de justicia que daría nombre a este espacio abierto ligeramente más grande.
Otros elementos interesantes de Molinaseca para el visitante
Básicamente, estos es el patrimonio histórico de esta población, si bien, posee otros elementos de cierta importancia para admirar con más calma, algo que un peregrino del Camino de Santiago que no se queda aquí, apenas tiene tiempo de admirar, ya que seguramente estará pensando más en la siguiente parada del Camino, que es Ponferrada.
Plaza García Rey
Esta plaza está fuera del Camino de Santiago que atraviesa Molinaseca por la Calle Real. Es una plaza alargada que se encuentra en paralelo a esta importante calle. En ella se encuentra en la actualidad el ayuntamiento moderno de Molinaseca.
Es por eso que, este espacio adoquinado no es Camino de Santiago y resulta un lugar mucho más tranquilo. En el centro y decorando la plaza, se encuentra una fuente de piedra, aunque moderna.
Históricamente, en este lugar había dos hornos comunales, pero se despejó para contar con una verdadera plaza en el pueblo. El nombre procede de un Comandante de Infantería y profesor de la Academia de Toledo, García Rey, procedente de esta localidad.
Ayuntamiento de Molinaseca
El edificio del Ayuntamiento de Molinaseca alberga además del edificio administrativo; Alberga igualmente una sala de exposiciones, que siempre tiene algo interesante que ver. Muy próximo, se encuentra la oficina de turismo de la localidad,
Plaza del Santo Cristo
Esta plaza es un muy pequeño espacio ajardinado y con varias terrazas donde tomar algo y descansar, en el que además, se juntan cuatro elementos artísticamente interesantes. Un crucero, que señala el final del pueblo original; un monumento al peregrino, que es una escultura; el Monolito de hermanamiento con Shikokuy; y por último una escultura viva, el conocido como Buda de Molinaseca, que está tallado en un árbol que sigue vivo.
Crucero del Santo Cristo
Este crucero del Santo Cristo, que da nombre a la plaza, se encuentra, tomando como referencia el paso del Camino Jacobeo, a la salida del pueblo, al final de la calle Real. La columna sobre la que se levanta está esculpida en piedra, con planta octogonal, y sobre él, una cruz de granito, al que se le ha añadido una imagen de Cristo crucificado en una vitrina para cobijarlo de las inclemencias del tiempo.
Este crucero ya queda reflejado en la literatura, cuando en 1202 la noble señora Doña Igobor hace una donación al Monasterio de Sobrado. No obstante, el crucero actual no es este medieval indicado, aunque ocupa el mismo lugar.
Monumento al peregrino
No podemos olvidarnos de la importancia del Camino de Santiago en esta villa, por los cientos de años y de los millones de peregrinos que por esta villa han pasado. Esta escultura que representa a Santiago peregrino es un reflejo de este vínculo y fue colocada en 1995, tras el resurgimiento de el Camino de Santiago.
Monolito de hermanamiento con Shikokuy
Este monolito conmemora el hermanamiento entre la Ruta Jacobea y el camino japonés del Shikoku Henro. Es una columna de granito de aproximadamente algo más de un metro de altura, regalo de la región insular de Shikoku a Molinaseca.
Talla de Kannon en árbol vivo
Esta escultura, conocida como El Buda de Molinaseca, está realizada en un nogal vivo. Se trata de una representación femenina de Buda, conocida entre los orientales como Kannos y cuyo significado simbólico está ligado a la compasión.
Playa fluvial del río Meruelo
Molinaseca, pese a carecer de salida al mar, lógicamente, posee como otras tantas poblaciones bercianas, de una playa fluvial en el río Meruelo. Este río, que nace de la unión de los ríos Complugo y Carracedo y el arroyo de Prada posee varios lugares donde en verano se embalsa y sus riberas se convierten en una playa fluvial.
Esta zona de baño para el verano en Molinaseca es testigo del paso diario de peregrinos camino de Santiago de Compostela a través del puente romano. Resulta fácilmente accesible por estar integrada con el casco urbano.
La Fiesta del Agua
Todos los agostos, en Molinaseca se celebra el día del agua, donde se desvía el curso del río para que atraviese la calle principal hasta la plaza del rollo. El objetivo original era limpiar las calles de Molinaseca, pero actualmente es una fiesta de reconocido interés turístico provincial por su tradición.
Hoy, se permite embalsar ligeramente la calle Real y permitir una «guerra» de cubos de agua entre los participantes, donde lo normal es terminar completamente empapados.
Información de interés¿Cómo llegar?
Molinaseca es un pueblo de El Bierzo en el Camino de Santiago Francés. Muchos son los peregrinos que pasan por aquí andando o en bicicleta. Pero para visitar Molinaseca en coche, el acceso a Molinaseca es por la carretera LE142, que une Molinaseca con Ponferrada, y pasa por Manjarín, la Cruz de Ferro y termina en Astorga.
¿Dónde comer?
Una de las señas de identidad de todo El Bierzo en general es su fantástica gastronomía. Molinaseca no es una excepción, salvo que al estar en el Camino de Santiago los principales puestos de comida a lo largo de la Calle Real están dedicados al peregrino. Esto hace que lo normal en esta calle sea encontrar un menú del peregrino, que suelen ser menús sencillos, sin muchas florituras pero bastante económicos. Por ejemplo, junto al río, el Mesón Puente Romano. Nuestra experiencia en el de enfrente no fue nada recomendable. En absoluto regresaremos; mucha presencia, pero nada más.
No obstante, en Molinaseca se puede comer muy bien, como descubrimos en nuestro último viaje, pero fuera de la Calle Real. Nuestra experiencia en el Restaurante El Bordón.
Restaurante El Bordón
Este restaurante no suele ser localizado por el peregrino normal, pues está fuera de la Calle Real y si no lo conoces, podrías visitar Molinaseca, pasar la calle que te permite llegar a él y no verlo. Y eso que está a tan solo 10 metros de la Calle Real, en una calle quebrada, se encuentra este restaurante.
En él, disfrutamos de una muy buena carta menú, y aunque parezca extraño, son especialistas en arroces. Así, preparan un arroz montañés con carnes diversas, muy similar al arroz a la zamorana exquisito. O bien las croquetas de botillo o brochetas con queso de Valdeón y cecina.
Estamos en un restaurante, que si bien no es cocina de autor o moderna, si reinterpreta la cocina tradicional presentándola de una forma moderna y atractiva. Totalmente recomendado.
Gastronomía berciana
Uno de los principales atractivos gastronómicos de El Bierzo es el Botillo, que posee incluso una denominación de origen propia; por tanto, pasar por el Bierzo y probarlo es casi de obligado cumplimiento para el visitante.
Pero no solo este contundente cocido es lo que vas a poder disfrutar en esta comarca. Igualmente puedes disfrutar de sus productos de temporada, donde destacan las castañas, los pimientos, las manzanas y las peras. Esto permite la elaboración de muchos y muy buenos platos.
Vinos y enoturismo
Otro punto importante a destacar en Molinaseca es que estamos en la DO. Bierzo, famosa por sus vinos tintos mencía y blancos godello. Un buena buena armonía para la gastronomía local siempre será usando estas dos variedades.
Adicionalmente, aunque no hemos nunca visitado ninguna bodega en esta zona de Molinaseca, este municipio está integrado en la Ruta del Vino del Bierzo, por lo que destaca como destino del vino.
¿Dónde dormir?
A la hora de dormir, Molinaseca posee varias propuestas, aunque las más demandadas son los albergues de peregrinos por ser los viajeros habituales. Nosotros nos hemos alojado en dos de ellos. Uno a las fueras, el albergue Santa María, bastante moderno.
Pero igualmente en el Albergue de peregrino San Roque, mucho más auténtico para vivir la experiencia del peregrino, y menos la de un viajero.
Pero si lo que quieres es hacer turismo, buscando la paz y la comodidad, Molinaseca cuenta con varios hoteles rurales. Tan solo nos hemos alojado uno de estos, y no lo recomendamos; el Hotel El Palacio. No obstante, viendo la oferta, creemos muchísimo más interesante La Casa Del Reloj, ideal para familias. O bien, Hotel Rural Pajarapinta, situado en la misma Calle Real.
Breve contexto histórico
Vamos a conocer un poco el contexto histórico de la creacción de Molinaseca. Para ello nos tenemos que ir a la época de dominación romana, cuando las minas de oro de Las Médulas estaban en plena explotación. Pero no solo eran estas, aunque fueran las principales. Había otras tantas minas e infraestructuras para su explotación en los conocidos como senderos del oro que canalizaban este metal precioso hacia Astorga. Es en este contexto que el puente romano sobre el río Meruelo tuvo una gran relevancia al ser parte de la calzada romana.
Estas vías de comunicación tan eficiente siguieron siendo usadas siglos después de la caída de Roma, primero por Suevos y Vándalos, luego Visigodos y por último musulmanes. Es en este contexto de la edad media, cuando se produce la repoblación de la zona por parte del Reino de León, si bien fluctuando la frontera con la administración del reino de Galicia; aunque tras Alfonso VI quedaría definitivamente integrado en León.
Y ya veis que este pueblo berciano es un gran pueblo de paso dentro del Camino de Santiago, al que animamos a todos a realizarlo, al menos una vez en la vida; pero es que, visitar Molinaseca merece una parada, ya que es un pueblo igualmente precioso y lleno de patrimonio digno de ser conocido.
¿Y vosotros? ¿Conocías este pueblo? ¿Lo atrevesásteis haciendo en Camino de Santiago, o lo habéis visitado como viajeros? Contadnos cómo fue vuestra experiencia en esta preciosa localidad leonesa.
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Me gusta la forma en que escribes. ¡Gran trabajo!
Magnifico reportaje. Conozco Molinaseca desde hace 30 años. He pasado vacaciones en tres ocasiones y vuelvo siempre que puedo. Es una localidad maravillosa. El Bordón, un acierto, aunque hecho de menos Casa Ramón, donde se come de maravilla, un clásico. Enhorabuena
Gracias por este comentario.
El Bordón fue un restaurante que probamos en nuestro último viaje. En otras ocasiones hemos comido en otros sitios, pero no en este que nos sugieres. Nos lo apuntamos para cuando podamos regresar por la zona. Ojala sea pronto.
Alfonso VI fue rey de Galicia y León, hijo de rey gallego. Nacido en Santiago de Compostela. Primero rey de Galicia, después también de León.
Alfonso VI es hijo de Fernando I, Conde de Castilla y Rey de León. Sus hijos son Alfonso VI, rey de León; Sancho I, Rey de Castilla y Garcia II, Rey de Galicia.
Este último fue despojado de su dignidad real por sus hermanos, y Sancho finalmente se hizo con toda la herencia de su padre Fernando I, pero al fallecer en Zamora, Alfonso se queda como heredero único, salvo las plazas de Zamora, de la Infanta Urraca y Toro, de la Infanta Elvira.
Igual te refieres a Alfonso III, pero este es hijo de Ordoño I, que tuvo a Galicia como reino independiente de León; o Alfonso IV, hijo de Ordoño II, pero ninguno nació en la Galicia actual.