Ciertamente hace bastante tiempo de nuestra última visita a este punto tan bonito y curioso de la Sierra de Francia; en la zona sur del Parque Natural de las Batuecas-Sierra de Francia. Se trata del Meandro de El Melero, un punto singular que hace de frontera entre Salamanca y Cáceres, siguiendo el curso del río Alagón.
Esta característica hace que sea un tema de discusión entre salmantinos y cacereños, disputándose “la propiedad administrativa” de este paraje natural; si bien, visitando este meandro de El Melero, se demuestra que la naturaleza es más sabia que el hombre.
Índice de contenidos
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Conoce la zona:
- Parque Natural de La Sierra de Francia-Las Batuecas.
- Riomalo de Abajo, el pueblo de Cáceres.
- Sotoserrano, el pueblo de Salamanca.
- Disfrutar del meandro de El Melero.
- El mirador de La Antigua sobre El Melero.
Información de interés:
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Preparando el viaje
En principio, no teníamos programada la visita a este meandro al sur de Salamanca, pero estábamos recorriendo algunos de los pueblos de la Sierra de Salamanca asociados a la Ruta del Vino de la Sierra de Francia, y nos decantamos por seguir el río Alagón, llegar a Sotoserrano y una vez allí, visitar el meandro de El Melero.
El Meandro de El Melero, la guinda del pastel del Parque Natural de la Sierra de Francia
A nadie se le puede escapar que esta zona del sur de Salamanca es una de las más atractivas de nuestra comunidad, con unas montañas y unos valles que permiten una climatología nada extrema, por lo que son ideales para hacer escapadas casi durante todo el año.
Toda la Comarca de la Sierra de Francia está declarada como reserva de la bioesfera por la Unesco; esta demarcación se extiende incluso a la Sierra de Béjar, también muy recomendable. Este territorio está caracterizado por la depresión por la que discurre la cuenca y afluentes del río Alagón.
Pueblos con encanto
Esto hace que sean valles con un cierto aislamiento, lo que ha producido un entorno natural y etnográfico único, y que sus pueblos derrochen un encanto especial, donde la mayor parte son Conjuntos históricos y algunos declarados como “Pueblos más Bonitos de España”.
Aunque hemos visitado muchos de los pueblos serranos de la zona, no hemos escrito una guía exclusiva de cada pueblo; aunque iremos haciéndolo con el tiempo. A destacar sin duda el más conocido de todos, La Alberca, aunque entre estas montañas hay otros tantos pueblos que igualan en encanto a este pueblo, como Miranda del Castañar, Sequeros, San Esteban de la Sierra, Mogarraz o Garcibuey.
Parque natural
Igualmente, esta zona tiene un gran valor ecológico, con especies de flora y fauna adaptada a la orografía de valles y montañas. La declaración como Parque Natural por la Junta de Castilla y León llegó en julio del 2000, y ampliada en 2008.
Igualmente, por la biodiversidad del parque, también está protegida por los programas LIC y ZEPA del proyecto Red Natura 2000.
Hombre y naturaleza
Estas condiciones de cierto aislamiento, pese a que no mucha distancia pasa la gran vía de la Plata, una de las calzadas romanas más importantes de la historia de la península, han hecho que tanto hombres y naturaleza hayan establecido una cierta relación de simbiosis.
Aún es posible ver cabreros y pastores que usan las antiguas cañadas con sus rebaños, lo que hace que, aunque queden pocos, todavía es posible encontrar maestros artesanos que crean sus quesos.
Otra adaptación son las variedades de vid casi exclusiva de este territorio. La rufete tinta y la rufete blanca, dos variedades de uva que caracterizan unos vinos muy interesantes que son la base y seña de identidad de la DO. Sierra de Salamanca. Es entorno a estos vinos, que desde hace ya unos años existe una oferta enoturística en torno a la Ruta del Vino de la Sierra de Francia.
También en este entorno existen olivares centenarios, muchos olvidados y sin producir, pero que poco a poco están siendo recuperados y puestos en producción, elaborando un aceite de oliva virgen extra de calidad reconocida a nivel internacional.
El Meandro de El Melero, un paraje entre dos pueblos
Básicamente, este paraje natural, al ser parte de la frontera entre Castilla y León con Extremadura, siempre ha tenido este “pique” de si es salmantino o si es cacereño. Pues es ambos, porque si bien el mirador más importante está en Cáceres, y se llega pasando por el pueblo de Riomalo de Abajo; el objeto visto, se trata de una extensión de tierra perteneciente al termino municipal de Sotoserrano, en Salamanca.
Visita a Riomalo de Abajo
La localidad de Riomalo de Abajo se encuentra en Cáceres, si bien la línea de frontera se encuentra en la entrada misma del pueblo, al atravesar un puente sobre el río Alagón, que es el que junto al río Ladrillar, forma este famoso meandro.
El pueblo es muy pequeño, con una población estable de apenas unos 70 habitantes censados, aunque en verano se llena de visitantes.
Patrimonio de Riomalo de Abajo
De este pequeño pueblo, con escasas construcciones de interés, podemos destacar la iglesia parroquial, dedicada a Nuestra Señora de los Dolores, que se localiza en la plaza de la Alquería. De su interior nos han comentado que es de interés una imagen de la Virgen de la Dolorosa, patrona de la población.
Actividades para realizar en Riomalo de Abajo
En este pueblo, una de las escusas más usadas es adentrarse en la comarca cacereña de Las Hurdes, antaño bastante estigmatizadas por un cierto retraso. No obstante, de gran belleza natural.
Desde Riomalo de Abajo salen varias rutas de senderismo, aunque nosotros no las hemos realizado.
El otro gran atractivo son las piscinas naturales en el río Ladrillar, donde las aguas frescas y limpias quedan ligeramente embalsada a la altura del pueblo, usando las riberas como playas fluviales, un tanto como las piscinas de El Bierzo, en León.
Desde la desviación que se localiza junto al puente, se llega a un camping, bastante concurrido durante nuestra visita. Esta senda es importante, porque siguiéndola rectos, a pocos kilómetros llegamos al mirador del meandro de El Melero Se puede hacer andando, aunque son unos cuantos kilómetros.
Sotoserrano
Algo más alejado de Riomalo, es el pueblo de referencia para visitar el meandro de El Melero desde Castilla y León. Es mucho mayor que su contraparte cacereña y posee algo más de encanto, pues sobre todo su zona antigua mantiene el aire de los pueblos serranos de la Sierra de Francia.
Patrimonio visitable
Como casi todos los pueblos serranos, no son muy grandes, por lo que recomendamos dejar el coche y visitarlos a pie. Disfrutaréis de la arquitectura popular serrana.
Este pueblo se articulaba como un pueblo de camino, pues durante siglos pasó una importante vía secundaria paralela a la Vía de la Plata y que de hecho era usada por las invasiones musulmanas a tierras cristianas. Esto quedó plasmado en un planteamiento de un pueblo que crece a lo largo de un camino, donde los principales monumentos están a lo largo de esta ruta.
Por la calle principal, nos encontramos una fuente o pilón con dos caños. El agua no está tratada, aunque todo el mundo dice que es potable. Nosotros hemos bebido y no tuvimos ningún efecto adverso.
Plaza mayor
A pocos metros se llega a la plaza mayor, donde se localiza el ayuntamiento, que no destaca especialmente más allá de poseer unos arcos muy llamativos en su fachada. En esta plaza se localizan muchos bares con terrazas, por lo que es un lugar muy animado y concurrido.
La plaza es el centro social de esta localidad, que tiene algo más de 500 habitantes.
También, destaca por su originalidad la Torre del Reloj, del siglo XVI y que es única en su estilo en la Sierra de Francia.
Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción
A esta iglesia se llega por la calle del Castillo o por la calle de Pancocho. Por ambos caminos no te quedará más remedio que callejear entre construcciones serranas y edificaciones modernas, algunas guardando el estilo; y otras, aberraciones arquitectónicas.
El caso es que, subiendo, llegaréis a la parte más alta, donde se localiza la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, del siglo XIII aunque con muchas reformas.
Bodega IV Generación
Si te gusta el enoturismo, en Sotoserrano tienes esta bodega familiar, Bodega IV Generación con más de 70 años de historia y que debes intentar visitar. La visita enoturística, bajo reserva previa en su web, empieza conociendo los viñedos, luego el proceso de elaboración la degustación y una zona muy atractiva dedicada a un pequeño museo del vino.
Situación y contacto:
Calle del Castillo, 7
37657 – Sotoserrano, Salamanca
Telf.: +34 618 741 461 / +34 615 342 948
@.: cuartageneracion14@gmail.com
Actividades que puedes realizar en Sotoserrano
Desde hace varios años, existe una ruta de senderismo denominada la «Ruta de los Tres Ríos»; que, con un recorrido de unos 8,5 kilómetros y circular, dada su dificultad baja, es accesible para todos los públicos. Durante el recorrido se puede disfrutar de los espacios naturales único de esta Reserva de la Bioesfera, pasando por los ríos Alagón, Francia y Cuerpo de Hombre.
Además, recorriendo este camino se pasa por una desviación que lleva al río y al puente romano. Pasando el puente, se llega a una playa fluvial en el río Alagón dónde puede darse un chapuzón o tomar algo en el restaurante El chiringuito.
Cómo llegar al mirador de El Melero
Como os hemos comentado, el mirador desde donde se obtiene las mejores vistas de este meandro de El Melero, se encuentran en el lado de Cáceres, por lo que hay que llegar desde Castilla y León a Riomalo de Abajo, e inmediatamente pasar el puente de acceso y que cruza el río Alagón, girar a la izquierda. Este camino lleva a un camping, pero siguiéndolo, a unos 3,5 kilómetros se encuentra el famoso mirador.
Y es que se trata de uno de los meandros más perfectos de Europa para fotografiarlo
El camino a este mirador está bien, aunque es una carretera de montaña y eso implica que es estrecha. y no tiene el mantenimiento que requeriría otra vía más importante. Dependiendo de la hora de la visita, podéis tener problemas de tráfico, ya sea de regreso, porque la vía aunque continua, tan solo nos adentra a las montañas por la Sierra del Cordón.
Aunque como son 3,5 kilómetros, a determinadas horas hay gente que deja el coche en el pueblo y sube al mirador andando. La única pega que le vemos a esto es que no toda la zona tiene sombra y a determinadas horas puede ser agotador; o que, a ciertas horas de gran afluencia de gente y coches, puede resultar peligroso cuando los conductores se ponen impacientes por llegar y aparcar.
El mirador de El Melero
Nuevamente, en determinados momentos del año, sobre todo en verano, este mirador se llena de gente curiosa, por lo que aparcar puede ser complicado, o bien te obliga a hacerlo lejos; porque, aunque existe un parking para coches, este resulta insuficiente.
Junto a este mirador cada vez más, hay puestos de comida y bebida tipo kiosco que venden de todo, a precios abusivos. Aunque cuando el calor aprieta, si no vienes preparado, es esencial hidratarse o tomar un helado o un bocata para hacer picnic.
No obstante, el mirador propiamente dicho, aunque se ve desde la propia carretera, está descendiendo unos cuantos metros en la ladera de la montaña. Aquí hay que tener cuidado, porque hay gente que se queda mucho tiempo, ocupando incluso la zona de paso y satura el lugar buscando la foto y el selfie perfecto.
Cambios en el paisaje del meandro
Una cosa curiosa de este río es cómo cambia su caudal a lo largo del año. De visitarlo a mediados de la primavera, lo vais a encontrar crecido y ocupando gran parte del cauce; mientras que, si vais ya a mediados del verano, el cauce se ha reducido mucho y dejando unas playas de arenas muy amplias.
Otro dato de interés es la hora a la que visitar el Meandro; aunque nosotros lo hicimos a primera hora de la mañana y el sol no nos molestaba en exceso, ya se veía que en poco tiempo no permitiría hacer buenas fotos o disfrutar de la vista con unos prismáticos. Los fotógrafos expertos que hemos consultado indican que por la tarde y con el sol a la espalda resulta especialmente hermoso.
Según sabemos, aunque no lo hemos probado, desde Guijo de Granadilla, en el embalse de Gabriel y Galán, se puede contratar un crucero fluvial por el río Alagón para visitar este meandro de El Melero.
Información general sobre el Meandro de El Melero
¿Cómo llegar?
Poco más hay que decir para llegar al meandro de El Melero hay que llegar a la localidad de Riomalo de Abajo, y girar en la desviación junto al puente que salta el río Ladrillar. Recorriendo algo más de 3 kilómetros por una carretera de montaña, se alcanza este mirador.
¿Dónde comer?
Nosotros durante nuestro viaje paramos a comer un almuerzo junto al Melero, porque habíamos madrugado algo. Pero tras visitar el lugar, nos recomendaron para comer el Hotel de turismo rural el Mirador del Soto. Realmente tomamos algo ligero, porque queríamos seguir nuestro viaje, pero en este sitio, os recomendamos un plato típico de esta zona. El Limón Serrano, o ensalada serrana, que llaman en La Alberca.
No obstante, también se puede picar algo en la plaza mayor de Sotoserrano, donde hay bares de tapeo, donde los fines de semana se toma el tradicional «vermut».
¿Dónde alojarte?
En nuestro último viaje no nos alojamos ni en Sotoserrano ni en Riomalo de Abajo, ya que estábamos de ruta por varias localidades de la Ruta del Vino de la Sierra de Francia. Nosotros en concreto nos quedamos en Casa Rural El Carrascal de Valdefuentes de Sangusín. Ahora bien, con amigos de la zona, nos han recomendado en Sotoserrano el Apartamento casa rural El Capricho o los Apartamentos El Mirador Del Soto, que es donde comimos.
En cuanto a Riomalo de Abajo, desconocemos la oferta hotelera. Sabemos que existe un camping, que es interesantes para los que disfruten de esta forma de viajar. Ya buscando en Booking, no hemos localizado ningún hotel o casa rural que podamos recomendaros. Sobre mapa, solo hemos visto la Casa Rural la Jurdana. Pero no sabemos qué tal es.
Breve contexto histórico
Hemos comentado el pique sobre si este meandro es salmantino o cacereño; la verdad es que actualmente es de ambos. Pues el mirador está a un lado de la frontera, en Cáceres; y lo observado al otro, en el término municipal de Sotoserrano, en la finca de la Romerosa.
Hasta hace con unos 200 años, la frontera de Salamanca con Cáceres llegaba más al sur; y nadie discutía en qué parte se encontraba, pero tras la división administrativa de 1833, que delimitó las fronteras actuales, quedando en esta zona entre ambas orillas del rio Alagón. De hecho, Granadilla, un pueblo museo abandonado de Cáceres junto al embalse de Gabriel y Galán (recomendable su visita) eran parte de Salamanca.
Esta característica hace que sea un tema de discusión entre salmantinos y cacereños, disputándose “la propiedad administrativa” de este paraje natural; si bien, visitando este meandro de El Melero, se demuestra que la naturaleza es más savia que el hombre.
Artículo muy bueno sobre el Melero, solo chirría el final de frase de arriba, escrito por usted.
(savia: La savia es el fluido o líquido transportado por los tejidos de conducción de las plantas)
Muchas gracias por la corrección. «Hasta el mejor escribano, comete un borrón».
Espero que este artículo no cree polémica, pues está hecho desde la observación de alguien que no es ni cacereño (aunque sí hijo de cacereño), ni salmantino (aunque sí de Castilla y León).