La verdad es que hablamos de muchas ciudades, pero a veces, se nos olvida recordar a Valladolid. Es cierto que no es la más bonita de las 9 capitales de Castilla y León, pero como nos gusta decir, es una ciudad de hermosos rincones. La mayor parte inconexos o sin continuidad. Pero en esta ocasión, queremos contaros un lugar, de parada obligada en una visita a esta ciudad. Se trata de El Campo Grande de Valladolid, un parque botánico, romántico y el pulmón de la ciudad.
El Parque del Campo Grande de Valladolid
Si un madrileño tiene su Retiro o su Casa de Campo; o un neoyorquino tiene su Central Park, para un vallisoletano, El Campo Grande este parque hace las mismas funciones. Es un lugar de descanso y esparcimiento. Su configuración hace de este parque un atractivo para las familias, ya que tiene muchos lugares de ocio pensando en los niños.
El jardín botánico de Valladolid
Una de las cosas que más llama la atención al visitante, es la gran cantidad de especies arboleas presentes que se ven incluso desde fuera y antes de entrar. Las hay de muchos origines, pero que finalmente se han adaptado al duro clima castellano.
Este parque, en medio de la ciudad hace de pulmón para los habitantes de Valladolid.
Nos adentramos en el Campo Grande
Actualmente, para garantizar la seguridad dentro del Campo Grande, este está vallado y posee varias puertas que se cierran a ciertas horas. Para entrar, podéis usar cualquiera de ellas, aunque hay dos puertas emblemáticas. La puerta principal da a la plaza zorrilla. Es una puerta moderna (y carente de gusto, sí, hay que decirlo). Donde hoy se encuentra el escudo de la ciudad, se levantó el teatro Pradera, un edificio icónico de hasta la primera mitad del siglo XX, pero hoy ni el recuerdo queda.
Este paseo nos lleva hasta la entrada original de la ciudad en época cortesana, pues esta al final, la Puerta del Príncipe. Es la continuación natural de la Calle de Santiago, que lleva directamente a la Plaza Mayor, una plaza reconstruida tras el incendio de 1561, en estilo italiano porticado.
Principales lugares a visitar en el Campo Grande
Además de la gran diversidad de flora, y desde hace unos años, también de fauna, el Campo Grande posee varios lugares interesantes a visitar y que marcan los principales hitos de una visita a este lugar.
Flora y fauna
Como ya os hemos comentado, se fueron trayendo plantas de diferentes lugares del planeta, de los territorios ultramarinos de España. Esto aporta gran variedad de árboles, además de plantas autóctonas.
Pero en cuanto a la fauna del Campo Grande, los habitantes más conocidos son los Pavos Reales. Están en un estado de semilibertad por el campo, aunque generalmente en la zona de la Fuente de la Fama. Desde la construcción del estanque, además hay gran cantidad de patos y aves acuáticas. Muchas ya de forma permanente. Otro habitante cada vez más común son las ardillas, que hacen las gracias de pequeños y mayores. Pero también palomas, tortugas y peces.
El Estanque
Da igual cuantas veces pases por este parque. Siempre terminas pasando por este estanque. No es muy grande, pero un barquero, de la saga familiar de “los Catarro”, lleva generación tras generación, dando paseos en barca en este estanque, llevando con sus historias y relatos a los más pequeños (y no tanto) a un mundo distinto. Al menos durante la vuelta al estanque.
Recientemente, y esta vez acompañando a nuestros niños, dimos una vuelta en la barca. Cuesta 1€ por persona, y bien pagado está. Nos trasladamos en el tiempo a momentos de nuestra más tierna infancia. Cada vez que volvemos a pasar por aquí, nos piden dar un paseo con El Cotarro, y nosotros decimos que sí, por ellos, y por nosotros.
La Cascada
Igual hasta los propios vallisoletanos piensen que eso está ahí desde siempre, pero en su larga existencia como jardín, la cascada no tiene tanto tiempo. Fue un complemento al estanque; para ello se hizo una montaña artificial con escombros de edificaciones caídas (Como el ayuntamiento de la época de los Austrias). Se canalizó el agua y esta empezó a caer de la cascada. En el interior de la montaña, se recreó una cueva. Para ello se dice que se compraron estalagmitas y estalactitas de cuevas de la Sierra de Atapuerca.
La Fuente de la Fama
Esta fuente monumental fue creada gracias a una suscripción popular como homenaje a uno de los mejores alcaldes de la Ciudad, Don Miguel Íscar. Está ejecutada en un pilón octogonal; en el medio, un pilar; y sobre él, una alegoría en bronce de la Fama; que está representada como una mujer joven y alada que sopla una trompeta hacia el cielo y de la que brota el agua.
Desde el 2008 la escultura que vemos es una réplica en idénticos materiales, por lo que pasa desapercibida. La original se expone en el archivo municipal de San Agustín.
La Pérgola y la Fuente del Cisne
Esta es otra de las fuentes monumentales de este jardín. La Pérgola es un espacio abierto donde en verano se dan conciertos de música y se baila agarrado. Con forma de rotonda, cuyos laterales se cubren por parras en verano, la fuente del centro, conocida como Fuente del Cisne es una de las más hermosas.
En el centro de la misma, se levanta un macizo que simula la forma de un jardín del que surgen seis sirenas que sostienen en sus manos peces que lanzan sendos chorros de agua. En su parte superior, la figura del cisne que da nombre a la fuente, en pose de echar a volar con sus alas extendidas.
Otros atractivos del Campo Grande
Esculturas
Todo el entorno está lleno de esculturas representativas de todos periodos por los que ha pasado este jardín. Pero si tuviéramos que destacar las más importantes, nos quedaríamos con las esculturas y bustos dedicados a Miguel Íscar, Leopoldo Cano, Gaspar Núñez de Arce, al fotógrafo de inicios del siglo XX, y a la poetisa Rosa Chacel.
Zonas infantiles
Los niños, siguen siendo niños. Así varias generaciones hemos crecido (y siguen creciendo) dando vueltas en La Paloma, la barca de Luis Gallego Martin, “el Catarro”, la tercera generación de barqueros. Actualmente su nieto, el nuevo “Catarro” ha tomado el relevo y sigue dando paseos a los niños y a sus papás, en la misma vieja barca.
Los cuentos e historias son los mismos, aunque actualizados. Y eso que, en cada viaje cambian los detalles. Da igual. Siempre son divertidas.
Y para los que no les gusta el agua, el parque posee varias zonas con columpios y zonas de juegos infantiles, por lo que es un buen lugar de descanso y esparcimiento familiar.
Pero ¿por qué está aquí?
Ahora sí que vamos a parar, un poco más en la historia de este lugar. Parece que desde época romana era un lugar de descanso, al estar junto a una cañada agropecuaria, haciendo de cruce de caminos. Se quedó a las puertas de la antigua cerca de la ciudad, por lo que se quedó como un lugar donde celebrarse ferias, mercados y justas. Es decir, un sitio público.
Los límites de este espacio empezaron a marcarse en el siglo XV, cuando se empezó a expandir la ciudad hacia el sur, configurando lo que hoy son la acera de recoletos y el Paseo de Zorrilla.
Su configuración actual, ya con la forma triangular ajardina data de 1787, aunque como hemos comentado, ya estaba más o menos configurado así anteriormente. En esta época de la ilustración se empiezan a plantar especies traídas de todas las partes del todavía imperio español; esto atrae a aves de forma natural, aunque algunas especies más exóticas son traídas de exprofeso. Así, aún podemos encontrar en su interior una faisanera, una pajarera y un palomar.
Entorno del Campo Grande de Valladolid
Además del Campo Grande, su entorno es una maravilla en la capital pucelana. Vamos a parar en algunos lugares próximos para el visitante ocasional que os recomendamos.
Llegando desde la Estación de trenes
Nos consta que muchos viajeros llegan a Valladolid en trenes, tanto en los Media Distancia como en alta velocidad. Por tanto, lo primero que ven es la Estación del Norte; una estación decimonónica bastante atractiva, aunque desde luego pequeña y en las horas punta, agobiante. Al salir, de esta estación, puede empezar a disfrutar del tapeo de Valladolid en la Estación Gourmet (mientras dure, porque había planes de cerrarla).
La Estación Gourmet
Este lugar es un buen sitio para tapear en alguno (o varios) puestos de comida; y tomarte un vino de cualquiera de las cinco denominaciones de origen de Valladolid. El local reaprovecha unos viejos almacenes que tenía Renfe. Dependiendo de la hora, puede estar a reventar, aunque si tienes suerte, puedes tener bastante espacio.
La estatua de Colón
Aunque las estatuas más conocidas de colón sean la de Barcelona o la de Madrid, Valladolid, en uno de los vértices del Campo Grande cuenta con esta escultura, ejecutada por suscripción popular a finales del siglo XIX y que representa la llegada el 12 de octubre de Colón a las Antillas.
La Acera Recoletos
Entre la estación y la acera recoletos, hoy hay unos jardines, bastante modernos y unos edificios de viviendas. En este sitio hubo un monasterio de Agustinos Recoletos, hoy totalmente desaparecidos, pero en cuyo recuerdo, nos queda el nombre. También hubo un frontón, pero no vamos a entrar en eso.
Esta acera es una de las calles más bonitas de Valladolid. Con obras cumbres de la arquitectura romántica. Lamentablemente, en medio de varias construcciones hermosas, se han colado “infiernos arquitectónicos” del siglo XX, sin gusto y estropeando al conjunto.
Esta zona es prácticamente peatonal,.. junto al Campo Grande se encuentra una zona deportiva polivalente, que se usa para ferias pequeñas y algunas exposiciones itinerantes. En esta zona hubo una judería en la baja edad media, en lo que eran las afueras de aquel Valladolid. Una placa en el suelo recuerda los Caminos del Sefarad.
La plaza de Zorrilla
Habitual punto de encuentro, hoy ya es un poco más de paso y menos de parada. Destaca la fuente, una versión más pequeña de una anterior que funcionaba como un reloj, marcando las horas y los minutos con sus chorros de agua. Coronando la plaza, la escultura de nuestro magistral José Zorrilla, poeta, dramaturgo y erudito romántico. Puedes visitar su casa natal, donde vivió y falleció; la conocida como Casa Zorrilla de Valladolid.
Y esto es lo que podemos contaros de este lugar. Para nosotros un lugar cargado de nostalgia; de la nostalgia de otra época, donde no nos teníamos que preocupar de tantas cosas. Un lugar, que recomendamos conservar, visitar, ver y disfrutar. Porque mientras los niños sean niños, este jardín romántico, será siendo un lugar para seguir corriendo, jugando, saltando,.. y maravillándonos de un mundo que se deja descubrir a los ojos de un niño.
Información de interés sobre Valladolid
Cómo llegar
Valladolid se encuentra en medio del gran valle de Castilla y León, por lo que resulta accesible desde casi cualquier dirección, al estar conectada con las principales autovías, la A62, la A601, y en partes, la A60 y la A11 (cuando se decidan a acabarlas).
Además, está en el corredor atlántico, por lo que está conectada con Madrid por la vía de AVE, conectando la ciudad con la capital de España en menos de una hora. Y a nivel internacional o larga distancia, cuenta con el aeropuerto de Villanubla.
Dónde alojarte
Si decidís hacer noche, es una de las ciudades con mayor oferta hotelera de Castilla y León. No obstante, si queréis un hotel cómodo y céntrico, os sugerimos en Hotel Boutique Catedral o el Nexus Valladolid Suites & Hotel. Opciones cómodas en el centro de la ciudad, para que os olvidéis del coche.
Dónde comer
Este es uno de los fuertes de Valladolid. Tanto es así, que nos cuesta decidir un único sitio donde recomendaros. La opción tapeo es una de las favoritas de los visitantes ocasionales. Así, por ejemplo, podéis elegir alguna de las Rutas de Tapas que hemos realizado. Por el centro, por la zona de la Catedral o por el Paseo de Zorrilla.
Pero si os gusta la mesa y mantel,.. aunque pueda parecer caro, la mejor relación calidad precio está en el Restaurante La Parrilla de San Lorenzo, con una oferta gastronómica tradicional, con buen producto y buenos vinos.
Y vosotros, los que como nosotros habéis conocido el Campo Grande de Valladolid, ¿Qué recuerdos os trae? ¿Qué le dirías a la gente que no ha visitado nunca? Compartid con nosotros también vuestros momentos en un comentario.
Nota: Imagen de portada cortesía de ElOsoViajero
AÚPA PUCELA