Estas palabras junto a la expresión «a tope«, reúnen la filosofía de vida de José Luis Prada, el alma del Palacio de Canedo, en pleno corazón de El Bierzo. Un apasionante proyecto de vida que junto a su mujer, Flor, han conseguido que sea un punto de parada obligada cuando se visita esta región.
Acabamos de regresar de visitar el Palacio, también conocido como el Falcon Crest del Bierzo, por las numerosas hectáreas de viñedo que rodean la finca. Bajo la marca «Prada a Tope«, la bodega va más allá de elaborar vinos de calidad. Se trata de una oferta única que apuesta por la originalidad en su decoración, el arraigo a las tradiciones y la preservación de los recursos naturales.
Palacio de Canedo, El Falcon Crest del Bierzo
En el Palacio de Canedo hemos podido disfrutar del auténtico botillo del Bierzo, hemos visitado su bodega, caminado entre sus viñedos, accedido a su tienda y a sus habitaciones, cada una de ellas decoradas de forma temática bajo el estilo tan autóctono que define a la finca. Y si fuera poco, una cuidada selección de productos propios completamente ecológicos como cerezas, castañas, vinagres, jabones, ambientadores… nos esperaban en su tienda.
Cómo llegar al Palacio de Canedo
Para llegar hasta Canedo, (ver mapa de ruta) tienes que ir hasta Cacabelos por la carretera LE-712, muy cerca de Ponferrada si vas por la Autovía A6. Atravesando el pueblo debes seguir los carteles que indican cómo llegar hasta Canedo. No te llevará más de 5 minutos.
El entorno del Palacio de Canedo
Al llegar, nos rodean viñedos de uva mencía, variedad única y que solo se da en El Bierzo. Esto hace que los vinos de la D.O. El Bierzo sea tan especiales. Al fondo del camino, en la parte media del monte, encontramos varias construcciones de piedra y madera. La zona más alta pertenece al Palacio Canedo, dónde los propietarios han plantado viñedos y gran variedad de árboles.
Qué ver en el Palacio de Canedo, el corazón de Prada a tope
Este palacio actualmente reconvertido a hotel, restaurante, bodega y fábrica de conservas tiene una larga vida. Construido en el siglo XVIII, por el Señorío de Canedo, durante varias generaciones fue utilizado como residencia señorial. Con el tiempo, cayo en desuso y finalmente fue abandonado. Gracias a la fuerte piedra con la que estaba construida y a la buena madera de la zona, se mantuvo en pié hasta que en 1987, Prada a Tope se fijo en él, y lo compro para reconstruirlo y conservarlo tal y como podemos disfrutarlo hoy.
Este palacio actualmente ha crecido con nuevas construcciones, pero gracias al buen gusto de su propietario, las ampliaciones se han integrado con el estilo original, de forma que solo los detalles nos indican que estamos en una ampliación y no en la construcción del siglo XVIII.
El edificio tiene varias plantas. La planta baja se dedica a la recepción de visitantes, tienda de productos Prada a Tope y salones de reuniones/comedores. En la parte de arriba llegamos a la zona del restaurante y la cafetería. Ambos ambientes están unidos a través de una balconada que goza de unas vistas espectaculares sobre El Bierzo.
Comer en el Palacio de Canedo
Además, tuvimos la suerte de poder comer allí. El equipo humano es realmente encantador y muy amable con el viajero. Pero ahí no terminó nuestra suerte. Prada y su mujer suelen pasear por el edificio saludando a todo el mundo. Como nosotros además habíamos concertado una cita con ellos, pudimos pasar una tarde inolvidable.
visita a los viñedos de Prada a Tope
La visita guiada recorre también los viñedos, haciendo una breve parada en el punto que llaman «El mirador», desde dónde se contemplan hay unas inmensas vistas sobre el valle del Bierzo. A la izquierda se ve Ponferrada, justo al frente, entre el valle y las montañas, las médulas, a las que dedicaremos una entrada propia. Justo detrás de estas, aunque algo a la izquierda está el poco conocido valle del Silencio, una maravilla de entorno natural, y a la derecha Villafranca del Bierzo.
Son muchas las experiencias que hemos podido vivir en este lugar, y las hemos vivido ‘A Tope‘, por lo que vamos a dedicar varias entradas más. De momento, esto solo ha sido un avance.
¿Conoces el Palacio de Canedo? ¿Qué fue lo que más te gustó?
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