Como en otras publicaciones de confinamiento, vamos a llevaros un trocito de Castilla y León a casa, aunque en esta ocasión, a través de sus vinos, pues como ya os contamos hace tiempo, nuestra tierra es una tierra de vinos. En este caso, os vamos a contar nuestras impresiones disfrutando de un vino blanco clásico de la DO. Rueda. El verdejo de la Bodega Castelo de Medina 2018, un vino procedente de una bodega que ya conocemos de hace tiempo y que no deja de sorprendernos con sus mimadas elaboraciones de vinos blancos.
En esta ocasión, como ya hemos anticipado, se trata de un verdejo, la variedad autóctona de la zona de Rueda, famosa por su frescura
Bodega Castelo de Medina
Esta bodega está situada en el municipio de Nava del Rey, un pueblo próximo a Medina del Campo. En esta zona se vienen elaborando unos vinos de gran calidad debido a la climatología extrema, con inviernos fríos y veranos extremadamente cálidos durante el día, con una bajada importante de las temperaturas por la noche.
Estas fueron las condiciones buscadas allá, por 1996, cuando se estableció esta bodega, que actualmente cuenta con 180 hectáreas de viñedo propio.
Enoturismo
Esta bodega, pese a ser moderna, está diseñada con un estilo muy clásico de arquitectura tradicional castellana con unas fachadas de ladrillo, piedra y forja. Es una bodega atractiva de ver y visitar, aunque la línea de enoturismo no la tienen perfectamente lista para mostrar sus instalaciones, donde además de los clásicos depósitos de acero, cuenta con una sala de barricas donde se crían algunos vinos blancos para obtener de ellos lo mejor.
Una visita a estas instalaciones, siempre concertadas con anterioridad se puede completar con una visita a la Nava del Rey, donde se puede disfrutar de una de las iglesias más atractivas de todo Castilla y León; la Iglesia de los Santos Juanes. Igualmente hay una tonelería artesanal que sigue elaborando las barricas por el método tradicional y por último, algunos restaurantes donde comer en una bodega rehabilitada como mesón.
Cata del Verdejo Castelo de Medina 2018
- Origen del vino: Este vino está amparado por la Denominación de Origen Rueda.
Variedad de uva: Vino monovarietal verdejo sin crianza.
Características
Visualmente es un vino de color amarillo pajizo; muy claro y trasparente. En la corona tiene brillos dorados muy bonitos. Posee un curioso toque de carbónico natural, lo que se nota en unas finísimas pequeñas burbujas.
Aromáticamente es muy fresco, muy frutal, con un este toque herbáceo fresco que recuerda a campos. Fruta no muy madura, manzana verde.
Al paladar es un vino bien realizado. Denso y ligeramente goloso que llena la boca de una gran frescura. Posee un retronasal persistente lo que alarga un postgusto, muy equilibrado. Volvemos a encontrar esa fruta y esa «hierba fresca» que invita a dar un segundo trago con la comida. Otra curiosidad es el toque chispeante de ese carbónico, muy sutil pero innegable que lo hace aún más atractivo si cabe.
Nuestras impresiones
Es un vino fácil de beber, muy atractivo y válido para cualquier ocasión. Ligeramente denso, se siente en la boca lo que ayuda a que invada de sensaciones agradables. Ideal para tomar fresco, que no frío. La burbuja que encontramos nos sorprendió, casi pareciendo una maceración carbónica. Esto lo hace francamente atractivo y diferente, pese a que los sabores son muy clásicos y los esperados en un verdejo 100%, ese toque “picante” le da personalidad.
Es un vino de armonías fáciles, pues el equilibrio entre la acidez y el alcohol lo hacen sencillo de tomar con muchos alimentos. Tenemos que reconocer que es uno de los mejores verdejos que hemos catado en los últimos tiempos, especialmente en este periodo de confinamiento. Fresco y atractivo.
Propuestas de armonía
Este vino es interesante para cualquier ocasión, pues si bien llena al paladar, carece de una estructura “pesada” para requerir acompañamientos especiales. Es un vino que recomendaríamos en un bar para acompañar a unas tapas, pues posee potencia de sabor para casi cualquier tapa o pincho. Pero, igualmente es un gran complemento para una comida con pescados, carnes blancas, embutidos algo picantes y quesos. Nos ha acompañado en varias ocasiones, como con un salmón a la plancha con su toque de eneldo.
En otras ocasiones, nos ha acompañado en una cena informal a base de pizza casera, con una pizza bianca, una pizza italiana hecha sin tomate, solo con una bechamel ligera de champiñones y panceta con quesos. También con una clásica pizza margherita. Sin duda todos unas armonías diferentes a las clásicas con pescado, en los que también ha destacado con un bacalao a la tranca. Sin duda, muy versátil.
Y si te ha gustado, adquiérelo
Si este vino blanco verdejo de Castelo de Medina de ha gustado, o te parece interesante; te dejamos un link para poderlo adquirir.
Y ya veis que incluso desde casa, podéis seguir disfrutando de esta tierra nuestra, amable siempre con el visitante y de potentes sabores. Con este verdejo Castelo de Medina 2018, nos hemos traslado a buenos momentos por la comarca de Tierras de Medina.
Y vosotros, ¿Conocías este vino verdejo Castelo de Medina 2018? ¿Sabías que ha ganado en diversas ocasiones el premio de mejor verdejo del mundo, hasta en tres ocasiones? Contadnos qué verdejo os han enamorado tanto como este a nosotros.