Gracias a la Sociedad Mixta para la Promoción del Turismo de Valladolid, pudimos disfrutar de un intenso y emocionante viaje gastronomico por valladolid, ciudad famosa por su Semana Santa (declarada de Interés turístico Internacional), su gastronomía puntera y la calidad de sus vinos, considerados por muchos como los mejores vinos del mundo.
 

El #Vallatrip ha sido un viaje 5 estrellas por Valladolid organizado con el fin de mostrar a 5 blogueros de Castilla y León (A la Buena Vida, Ver Que Hacer, Mi Objetivo son tus Ojos, Terroaristas, Bodega Ateneo y Destino Castilla y León) la oferta turística y gastronómica más actual de la ciudad bañada por el Pisuerga.

Si eres un sibarita como nosotros y te apetece disfrutar de una escapada deluxe por Valladolid, quieres darte un homenaje o sorprender a tu pareja esta primavera, no te pierdas los siguientes rincones, son para morirse del gusto…

Ruta del Vallatrip, viaje gastronomico por Valladolid

De viaje gastronomico por Valladolid

Hotel Marqués de la Ensenada

Comenzamos el viaje en el Hotel Marqués de la Ensenada, un hotel construido en una vieja fábrica de harinas rehabilitada sobre al Canal de Castilla. Apenas se diría que se asienta sobre una antigua harinera pues todo en él se respira nuevo, salvo en la sala de la planta baja donde puede contemplarse una colección de máquinas que servían para la transformación del trigo en harina y una ventana desde donde puede verse un gran salto del agua que transcurre bajo el edificio.

Todo el hotel está fina y coquetamente decorado, inspirado en la ilustración, época que le toco vivir al Marqués de la Ensenada, promotor del Canal de Castilla y cuyo personaje se ha utilizado para dar nombre a este hotel 5 estrellas de Valladolid.

Finca y Bodegas Arzuaga

Tras una breve presentación nos dirigimos a disfrutar de las Bodegas Arzuaga (ver como llegar) un lugar que destaca por ofrecer en si mismo una completa oferta de enoturismo: alojamiento, restaurante, visita a la bodega, vinoterapia, spa, visita a los viñedos y a sus fincas colindantes donde abundan los ciervos y jabalíes.

Bien podría pasarse allí un fin de semana completo sin salir de sus instalaciones, y es que esta complejo da mucho de sí.

Nos sorprendió mucho visitar la finca la Planta. Ver los venados y jabalíes en semilibertad es algo a lo que uno no se acostumbra tan fácilmente. Con la cámara en mano disparamos decenas de veces. Imaginamos (ya que no hemos estado nunca) que la sensación debe ser similar a realizar un safari fotográfico por África. Es impresionante poder estar a un metro de un jabalí.

A continuación fuimos a la bodega. Si eres un winelover, es una experiencia que no debes perderte. Su sala de barricas es muy bonita y allí te enseñarán cómo elaboran sus vinos.  Del Spa y sus tratamientos mejor no hablamos, que se nos van a poner a todos los dientes largos…

Como diría nuestro amigo y bloguero Gonzalo de «A la buena Vida», comer allí su lechazo asado es de auténticos “vividores”. Es en la Ribera del Duero donde el lechazo asado alcanza su máxima expresión. Más aún si lo armonizamos con el vino tinto crianza marca de la casa y buque insignia de la bodega junto a su Pago Florentino. Dos grandes vinos para una exquisita comida.

Ruta nocturna Ríos de Luz en Valladolid

A la tarde, ya casi de noche, emprendimos la ruta “Ríos de Luz” donde los edificios más representativos de la ciudad ofrecen distintas combinaciones de luces y sombras, contemplándolos de una forma diferente, casi mágica y hechizante.

Gracias a esta ruta descubrimos rincones únicos en la ciudad mientras nos acercábamos al punto de inicio de nuestra ruta de gastronómica, y es que si por algo destaca Valladolid es por la calidad y variedad de su tapeo.

Ruta de tapas por Valladolid

Restaurante Ángela

Nuestro primer punto de partida fue el Restaurante Ángela. De inspiración alemana, fusiona cocina germánica y castellana tradicional de manera muy elegante; Tuvimos ocasión de probar su tapa de bacalao al pil pil en cucurucho y lechazo escabechado. Ambas tapas ganadoras de pasados concursos y verdaderamente innovadoras.

Restaurante Los Zagales

Atravesando la plaza mayor llegamos al Restaurante Los Zagales, uno de los mejores lugares para disfrutar de la alta cocina en miniatura a través de sus novedosas tapas de Valladolid. Los Zagales se reinventan cada año para seguir estando entre los mejores. Si vas por allí, pide tu «Tigretostón«, te va a encantar. A nosotros nos sorprendió muchísimo por su envoltorio a modo de «Tigretón» relleno de un intenso sabor a morcilla.

Taberna Wabi Sabi

Finalizando esta ruta de tapas, no podía faltar el Restaurante Taberna Wabi-Sabi que fusiona la cocina de oriente con la de occidente. Cocinas de aquí y de allí se combinan para ofrecer tapas muy variadas e innovadoras como la tapita de Sushi o la mini-hamburguesa de pescado. Están deliciosas.

Ocio nocturno en Valladolid

Fuera de programa, descubrimos un poco de ocio nocturno por algunos de los garitos más míticos de Valladolid. Junto a la catedral por el lado de la universidad encontramos el Herminios, un bar con más de una y dos décadas ofreciendo buenas copas al ritmo de jazz. Allí se celebran conciertos y alguna que otra tertulia. Y como nos pillaba cerca, paramos a tomar la última copa en el café Berlín, un pequeño bar con mucho encanto y música que se aleja de lo más sonado y comercial.

Visita al Museo de Arte Contemporáneo Patio Herreriano

Al día siguiente, después de retomar fuerzas con el desayuno a la carta que nos sirvieron en el Hotel Marqués de la Esenada (merece mucho la pena) caminamos hasta el Museo de Arte Contemporáneo Patio Herreriano, un espectacular edificio muy – no  muy frecuentado – que cuenta con obras artísticas de vanguardia y contemporáneas.

Te daremos una pista para que te animes a visitarlo: en su interior encontrarás bocetos de Salvador Dalí y obras de Miquel Barceló o José Caballero.

Enoturismo urbano en la Señorita Malauva

Después de dedicar toda nuestra atención al Museo de Arte Contemporáneo y hacernos la fotografía obligada en su Patio Herreriano, llegó la hora de disfrutar del enoturismo urbano de la Señorita Malauva. Y decimos enoturismo por que no sólo se ofrecen vinos, aquí se despachan también juegos, catas y muy buenas sensaciones.

Por equipos jugamos a reconocer los aromas presentes en un vino a través de las gominolas que catamos a ciegas con los antifaces «malauveros» puestos. A través del juego su propietario, Gustavo, nos dio un repaso por los vinos blancos de la provincia de Valladolid: el Vino Blanco «Circe»,  el Vino blanco «El Lagar del Rey» y el Vino blanco «On» elaborado con té verde y ginseng (original cuanto menos)

Restaurante Trigo, la próxima Estrella Michelín

Realmente no sabemos si el Restaurante Trigo (Ver cómo llegar), traerá a Valladolid la ansiada Estrella Michelín, pero desde nuestra modesta opinión, bien lo merece el exquisito y profesional trabajo del chef Victor Martín. Cocina muy actual con un fuerte componente de producto fresco, local y de temporada. Todo junto y con las manos expertas de Víctor, hacen que el resultado vaya más lejos que comer, siendo una experiencia extraordinaria.

Y para concluir…

Este viaje que proponemos pasa por los lugares y establecimientos más punteros de Valladolid, que recogen tradición y modernidad a partes iguales y que han conseguido que sus vinos y oferta gastronómica sean referentes de la gastronomía en Castilla y León.

No hace falta que recorras la ruta tal como te la hemos contado, pero si te animamos a que disfrutes de alguna de estas propuestas. Vivirás uno de esos fines de semana que se quedan para siempre en la memoria.

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