Una vez más, y en un verano muy atípico, nuestros viajes nos llevaron hasta nuestra amada comarca de El Bierzo, en el norte de León. Allí pasamos unos cuantos días, donde entre otras cosas, pudimos disfrutar de un poco de enoturismo en uno de los lugares más emblemáticos de la zona, el Palacio de Canedo, sede de Prada a Tope. Además de disfrutar de su terraza de verano, nos regalamos un par de caprichos, unos vinos de Prada a Tope, un tanto representativos de la DO. Bierzo.
Bierzo, tierra de vinos blancos y tintos
Aunque la mayoría de las zonas vitivinícolas, poseen variedades tintas y blancas admitidas, suele haber una que destaque sobre las otras. Por ejemplo en Rueda, sus blancos de la variedad verdejo o suavignon; o en la Ribera del Duero, los tintos de la variedad tempranillo. Y está bien que sea así,.. es lo que la tradición ha dado.
Pero el Bierzo posee dos variedades estrella, la blanca Godello y la tinta Mencía, que son dos maravillas en sí misma. Ambas son autóctonas, aunque la producción de la Mencía sea muy superior al resto de variedades.
Vinos de Prada a Tope
Un valor seguro para hacer enoturismo en El Bierzo, nos duele decirlo así, porque no hay muchas otras alternativas, pero es cierto, para disfrutar de una grata experiencia de turismo asociado al vino hay que ir al Palacio de Canedo. En otras bodegas cuesta conseguir que te atiendan si no eres un grupo, avisas con varios días de antelación, o si es, o no, fin de semana. Esto es algo que en el Palacio de Canedo no ocurre.
En todas nuestras visitas, ya sea para comer en el palacio, o para conocer la bodega, sus viñedos o sus instalaciones, casi siempre es posible y no hay problemas.
Como teníamos ganas de llevarnos un buen recuerdo, pasamos a comprar una muestra de los vinos de esta bodega para catarlo de forma tranquila y pausada en nuestra casa. Elegimos un blanco godello y un tinto mencia roble del 2018. Nos hubiera gustado llevarnos un espumoso Xamprada, pero ya no les quedaba,.. Es que está muy bueno, lo sabemos de otras visitas.
Cata de los vinos de Prada a Tope del verano del 2020
Analizaremos ambos vinos por separado, ya que son dos magníficas elaboraciones. Muy diferentes entre sí y auténticas joyas que produce el Bierzo.
Cata del Blanco Godello 2019
- Variedad de uva: Vino blanco monovarietal de Godello de El Bierzo.
Origen del vino: Vino blanco amparado por el Consejo Regulador de la DO. Bierzo.
Vinificación: Vendimia manual seleccionada con fermentado sobre lías de levaduras autóctonas y maceración en depósito durante al menos 3 meses.
Características
En copa posee un color amarillo pajizo y reflejo dorado verdoso que puede recordar a la verdejo.
Aromáticamente es muy frutal, con gran presencia de frutas tropicales frescas, como la piña.
Al paladar es fresco, con una acidez perfecta compensada con esa cierta dulzura de las frutas tropicales. El gusto final es ligeramente amargo, lo que invita salivar y seguir acompañando a este vino.
Nuestras impresiones
Se trata de un vino blanco muy fresco y atractivo. Fácil de beber y que pide ser armonizado. Es una variedad de vino que nos gusta mucho, con sus toques que marcan su propio carácter.
Es de esos vinos que te hacen recordar una buena tarde de verano, disfrutando de una copa en buena compañía.
Armonías
Es un vino bastante versátil y llama a ser combinado con alimentos. Lo más simple es decir que es ideal para acompañar a pasta y pescado, pero tiene carácter y sabor para acompañar a carnes blancas y guisos. Fresco es un vino muy refrescante, ideal por ejemplo para un afterwork de los que se vivían antes del «bicho».
Nuestra experiencia armonizando con este vino es variada, ya que lo hemos tomado con diversos platos, y en general su potencia de sabor lo hacía destacar. Desde una empanada berciana, que se asemeja de lejos con la gallega, pero es sutilmente diferente. También lo hemos tomado con armonías más clásicas, como el arroz negro con calamares que nos brindaron los amigos de La mesa del Conde; y en otra ocasión, un clásico bacalao al ajo arriero, también un plato leonés.
Resumiendo, y aunque nos gustan mucho los verdejos clásicos de Rueda, este es otro de nuestros grandes blancos de España. Sin duda algo que disfrutar poco a poco, y mejor en buena compañía.
Cata del tinto Mencía 2018
- Variedad de uva: Vino tinto monovarietal de Mencía de El Bierzo.
Origen del vino: Vino tinto amparado por el Consejo Regulador de la DO. Bierzo.
Vinificación: Procedente de agricultura ecológica y vendimia manual seleccionada. Fermentación con levadura autóctona y crianza de 10 meses en barrica de roble francés nueva y redondeo en botella de al menos otros 6 meses más.
Características
Visualmente es de un color rojo picota intenso y con matices azulados en su corona. De una capa media, es limpio y brillante.
Aromáticamente, la variedad tiene gran peso con ciertos aromas herbáceos y fruta fresca, aunque con matices balsámicos aportados por la barrica, sutiles toques de coco y vainilla bien integrados.
En boca se le nota que ya es un vino con una cierta estructura, aunque sigue manteniendo la frescura, asociada a una acidez bien conservada de un vino sin una crianza prolongada. El toque de frutos rojos frescos es muy atractivo, que incluso se encuentran en un retronasal bastante largo.
Nuestras impresiones
Tenemos «el problema» de ser unos grandes fans de la variedad Mencía, y quizás por esto no seamos totalmente imparciales, pero cuando algo te gusta,.. ¿qué le vas a hacer? Este tinto nos encanta, el sutil toque de madera es el punto perfecto que le quedaba para hacerlo casi perfecto.
Este vino es una gozada, y cada vez que vemos una franquicia de Prada a Tope, suele estar entre nuestros preferidos. Está muy equilibrado entre una fruta fresca, y al mismo tiempo, con el cuerpo y sutilizas creados por la crianza en barrica. Es un gran trabajo el que hay detrás de este vino de Prada a Tope.
Armonías
Este tipo de tintos los hemos tomado en muchas ocasiones, se prestan a muchos tipos de armonías, desde la más simple de un tapeo rápido, con quesos y embutidos, queso con membrillo,.. pero igualmente acompaña a elaboraciones más cuidadas como carnes rojas, guisos y asados. Y por qué no, un contundente botillo, que no deja de ser un cocido.
Esté vino lo hemos probado en varias ocasiones, acompañando a carnes, ya sea a la plancha con especias, o bien con un guiso de conejo de conejo a la miel, un guiso tradicional de nuestro recetario realmente atractivo, donde un vino con esos toques, ligeramente especiados, es realmente una gran armonía. Este plato os contaremos cómo prepararlo.
Y hasta aquí, nuestras experiencias catando los vinos de Prada a Tope; unos vinos muy atractivos y curiosos que os recomendamos probar. Seguro que os enamoran.
“Ponme un vino de prada” dijo nunca nadie en ningún restaurante de españa.
Imagino que en tal caso dirían, «Un Prada a Tope»,.. :/