Situémonos en Valladolid. Apenas a 15 km en coche, por la autovía A62, llegas a Cigales, en el corazón de la Denominación de Origen Cigales (DO. Cigales). Aunque en la zona hay muchas bodegas cuyos caldos son extraordinaria calidad, me voy a centrar en Bodegas Ovidio García, ya que es una bodega que he visitado personalmente y en varias ocasiones he catado sus vinos.
 

Visitando las Bodegas Ovidio García

Mi primer encuentro con esta bodega fue hace unos años, ya que organizando un encuentro turístico centrado en Valladolid y su entorno con un grupo de couchsurfing, tuve que buscar una bodega atractiva de visitar y cerca de la ciudad. Bodegas Ovidio García ofrecía estas condiciones. Por tanto, me puse en contacto con la bodega para realizar la visita guiada y una cata.

Conociendo la bodega

El día de la cata llego, y tal y como habíamos acordado, nos estaban esperando en la plaza mayor de Cigales, porque la calle Malpiqué no es fácil de encontrar para alguien no familiarizado con el pueblo, pero allí estaban para guiarnos hasta la bodega.
 

Una bodega tradicional de más de 300 años

Aparentemente, solo vemos una nave industrial moderna, pero en su interior se encuentra el acceso a una bodega tradicional de la zona de Cigales. Según nos contaron, el origen de esta bodega se remonta a más de 300 años de antigüedad. Parece ser que existía una gran bodega subterránea con muchísimas cavidades escavadas en tierra, pero que finalmente fueron divididas y algunas cayeron en el olvido.

Nuestro guía nos comentó, que cuando se funda la bodega y realizaron los trabajos necesarios para rehabilitar la antigua bodega, y durante los mismos, se descubrieron otras cavidades hasta la fecha desconocidas que estaban ciegas y no había acceso desde el exterior. La bodega que pudimos visitar, había integrado esas cavidades como ampliaciones a la original.

Por lo que pudimos ver, estas cavidades están excavadas a mano y permiten la elaboración y conservación de los vinos en unas cualidades óptimas, ya que durante todo el año mantienen unas temperaturas apenas variables entre los 10 y los 14ºC. Siendo finales de verano hacía entorno a los 14ºC.
 

Una prensa original

Uno de los objetos que más atrajo a mi grupo de turistas fue la prensa de estilo romano original de madera. Aunque ya no está en uso, sin dudad nos pareció impresionante verla. Creo que es punto obligatorio para cualquier visitante a la bodega.

Llegamos con la imagen típica de los vinos de la DO. Cigales, que son los rosados, pero como se encargaron en decirnos, también se dan otras variedades menos conocidas. Durante la cata, Bodegas Ovidio García nos enseñó su tradicional vino rosado y los tintos, 100% tempranillo. También nos dio a probar una tirada especial, también con uva tempranillo, unos vinos reserva que requieren un trato especial en la bodega, ya que están varios meses en barrica y en botella.

 

Para la elaboración de estos vinos tintos, nos comentó que cuentan con unas cavidades dentro de la bodega, que se utilizan como dormitorios de estas barricas de madera, mezcla de roble francés y roble americano, y que permiten obtener unos sabores y aromas propios que caracterizan sus vinos.

Resumiendo, se trata de una bodega familiar, con gran calidad e interés turístico. Si pasas por la zona de Cigales, te recomiendamos concertar una visita.

Para contactar con ellos, puedes hacerlo por email, info@ovidiogarcia.com, o llamando al 628 50 94 75. Puedes seguirlos por Twitter en: @bodegas_ovidio. El coste de la visita guiada y cata: 5 € persona.

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