El Real Sitio del Palacio de Riofrío es probablemente uno de los menos conocidos de los palacios reales de Patrimonio Nacional. Este palacio fue un capricho inacabado que nos llega a nuestros días como un ejemplo de cómo era la vida en una corte del siglo XVIII, porque al estar sin terminar, no ha sufrido casi modificaciones.
En las estribaciones de la sierra de Guadarrama, en su vertiente segoviana, se encuentra esta construcción inconclusa.
Cómo llegar al Palacio de Riofrío
Actualmente esta finca tiene abiertas 2 de las 6 puertas existentes, la de Madrid, por el norte y la de Segovia por el este. El palacio en sí no está en el medio de la finca.
Abre en una ventana independiente cómo llegar al Palacio de Riofrío
El palacio está a escasos 15 kilómetros de Segovia capital, en el municipio de Navas de Riofrío.
Historia del Palacio de Riofrío
Siempre hemos defendido que conocer la historia de un lugar nos ayuda a comprender cómo llega a nuestros días. En este caso, esta necesidad es incluso mucho más importante, ya que los devenires de nuestra historia configuraran el estado de este palacio.
Hay que situarse en el siglo XVIII, en la corte del primer rey Borbón, Felipe V, el príncipe de Asturias Fernando, está a punto de reinar, con lo que la esposa del rey, Isabel de Farnesio deberá dejar todo su poder acumulado.
Ha previsto que para su descendencia directa tronos en Italia, aunque para el infante más joven aún no hay nada seguro. Dado que el trato con la futura reina consorte y su marido no es completamente cordial. Esta reina madre manda construir una corte alternativa para ella y su hijo.
El paraje era conocido por la familia real. A escasos 20 kilómetros se encuentra los reales sitios de Valsain, rico en caza y pesca, pero que hay que reconstruir de un incendio reciente. También el Real Sitio de la Granja, donde Fernando VI piensa gobernar. La reina disfruta de la cercanía a Segovia y de la Sierra de Guadarrama, por lo que adquiere al Marqués de Paredes la finca en 1746 para hacer en este lugar un lugar de su propio dominio.
Así, el secretario italiano Annibale Scotti, que posee conocimientos de arquitectura, influye para dotar al futuro palacio de un estilo mucho más italiano que el realizado en el Palacio Real de Madrid por Sachetti. El arquitecto italiano Vigilio Rabaglio finalmente hará de Riofrío el más italiano de los palacios españoles.
Las obras se inician en 1751, pero con el fallecimiento de Fernando VI, su hermanastro Carlos III, hijo de Isabel, tiene que regresar de su corte de Nápoles para hacerse cargo del reino de España en 1762. En estos 9 años se construye todo lo que hoy podemos visitar. Eso demuestra la premura que la reina Isabel tenía por tener acabado su obra.
Isabel de Farnesio, de nuevo reina madre volverá a recuperar su poder en la corte, con lo que podrá disfrutar del Real Sitio de La Granja, así que se olvidará completamente de Riofrío. Ya solo será usado por los monarcas hispanos como pabellón de caza. Pero prácticamente nunca harán noche en él, puesto que poseen La Granja muy cerca, completamente preparada para ellos.
Tan solo el rey consorte Francisco de Asís, marido de Isabel II, utilizará este palacio de forma más o menos habitual para disfrutar de la caza. Más tarde, su hijo Alfonso XII, utilizará Riofrío para pasar el luto durante 2 meses por la muerte de su primera esposa, Dª María de las Mercedes.
Visita virtual por el Palacio Real de Riofrío
La finca actualmente se conserva casi como nos lo dejaron nuestros antecesores. Por lo que su visita es como entrar en una máquina del tiempo.
Entorno de la palacio
Según atravesamos la finca, lo que vemos es un entorno natural de espectacular belleza. Dependiendo de la época del año en el que visitemos el palacio, podemos ser testigos de la berrea. La finca posee ciervos, que berrean gamos, que roncan y corzos, que ladran. Y como telón de fondo, la Sierra de Guadarrama, con la Mujer Muerta como principal montaña a la vista.
Aparcamos en lo que hubieran sido unos bonitos jardines, pero que actualmente es un parking para visitantes.
No obstante, desde hace un par de años la zona del coto está abierta al público para la práctica de senderismo, con algunas rutas interesantes por este bosque de encinas
En el interior, encontramos la taquilla. Aunque no es obligatorio, recomendamos la primera vez la visita guiada. Cuesta 4€ por persona, pero las explicaciones que los guías dan merecen su pago.
Estancias palaciegas
Capilla real
Lo primero que hay que ver es la capilla, la única estancia acabada, donde bajo el altar se encuentra la primera piedra de la construcción. Posee unas ventanas interiores del piso superior que permitían a la corte asistir a misa sin juntarse con el servicio, que permanecía abajo. Es el típico caso de capilla de transición entre el barroco al neoclásico.
Dentro del palacio no se permite la realización de fotografías, y no hemos sido capaces de encontrar una imagen. Así que no os la podemos mostrar.
Patio del Palacio Real de Riofrío
Tras ver el patio, un precioso ejemplo de arte neoclásico, empieza la visita. Como ya os hemos dicho, no está permitida la realización de fotografías, salvo aprobación por Patrimonio.
Desde el patio iremos a las escaleras dobles que permite subir a la zona palaciega, concentrada en la parte superior. No se visita nada en los pisos inferiores porque las estancias están vacías.
Habitaciones reales
Durante la visita os explicarán la historia, cómo y porque este palacio está donde está y en el estado que está, y os enseñarán las habitaciones que se habían destinado para la reina Isabel y el infante Fernando.
Uno de las cosas que más no llama la atención son las simetrías buscadas, donde se juega con la perspectiva en un juego visual muy equilibrado.
Tras esto se visitan las estancias que ocuparan Francisco de Asís, y Alfonso XII, que eligió este palacio para pasar el luto por ser el único en el que no tenía recuerdos con María de las Mercedes.
Museo de la caza
Por último, se visita el museo de la caza. Este museo muestra piezas de representación de la actividad cinegética (o de caza) que van desde la prehistoria a la actualidad. Todas las piezas son copias, aunque de una gran calidad, por lo que pudieran pasar por auténticas. Este museo creado a mediados del siglo XX recoge historia de la caza, una actividad muy importante en la historia de la humanidad y piezas disecadas de la fauna ibérica.
Los dioramas y fondos que recrean habitas fueron realizados por José Luis Benedito López y Emilio Ruiz del Río, en 1965; les llevó cinco años. Este museo, muy probablemente hoy no hubiera sido posible realizarlo, pues las piezas que se muestran hoy están en peligro de extinción.
Si volvemos al exterior, el paraje es ideal para hacer un picnic, ya que hay una zona habilitada con bancos y mesas. Podemos dar una vuelta al palacio haciendo una ruta de senderismo sin dificultad alguna, ya que es de escasos kilómetros.
Consejos para visitar el Real Sitio de Riofrío
El coste por separado son 7 euros, por lo que creemos que merece la pena.
Dada la cercanía del Real Sitio de La Granja, existe una entrada conjunta por 10 euros que permite visitar ambos palacios.
Este pase conjunto dura 48 horas, por lo que nuestro consejo es visitar un palacio el sábado por la mañana, luego las fuentes de abajo de la Granja, que funcionan los sábados por la tarde. Y, el domingo visitar las fuentes de la parte superior, y a la tarde el otro palacio.
Al menos, la primera visita a estos palacios la recomendamos con guía, aunque sean 4 euros más. Merece la pena ver como nuestros antepasados ya realizaban «obras faraónicas» hace años; pero que hoy podemos disfrutar de otra época más tranquila y más romántica.
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¡Muy interesante!
Saludos
¡Qué gran post! Sin duda, uno de los palacios reales más «olvidados». Y, en mi opinión, no porque no sea bonito, ya que es precioso. De hecho, le dedicamos un artículo en nuestro blog.
Saludos